6.27.2011

Nunca quise una Barbie

Participando en una celebración de cumpleaños, volví a retomar esa reflexión. De niñas, mis primas y yo siempre jugábamos con las benditas muñecas. Yo nunca me divertí así, prefería una bicicleta. Cada vez que hay una celebración de alguna niña, preguntan: "¿Qué le regalamos?" y la respuesta clásica es: "una Barbie". 


Yo nunca quise una Barbie. Me parece que con su cara de alegría no transmiten nada. Sus movimientos son muy cortos, así que son el ejemplo de una mujer de adorno. Yo quería algo mas dinámico. No era raro encontrarme con alguna figura de acción de mi hermano pequeño. Las Barbies ahora son mas inteligentes: ya son doctoras, abogadas, etc. Aún así no me gustan. Acompañadas de un tipo que se llama "Kent" que tampoco hace nada. Son una pareja que no proyecta, no inspira y que deja la mente vacía. 


Una de mis primas tenía las famosas "Polly Pocket", eran diminutas y las casitas tan curiosas. Abrías por aquí y por allá. Tan pequeñas y tan detalladas que todo funcionaba y lo mirabas mas de cerca y hasta florecitas tenían dibujadas. Mi madre y demás seres queridos no podían pagarme esos juguetes tan caros. Tuve uno o dos estuches a lo mucho. 


Yo disfrutaba pasar el tiempo imaginando lo que quería que esos estuches tuvieran. Hacía mi propio diseño con papel y tijeras. Marcadores y crayones hacían la ambientación; las grapas eran sillones, camas o mesas; cortaba un par de tréboles y eran los árboles. Todo depende de la imaginación y la creatividad. Descubrí que no habían límites. Yo decía es un hotel y colocaba habitaciones y ya era un hotel efectivamente. Si quería que fuera una casa de vacaciones, colocaba una gran piscina y con agua y todo... aunque el marcador se corriera, era siempre el efecto que yo quería que tuviera. Imaginaba e inventaba una forma de lograr construirlo. 


Sólo digo yo no quise una Barbie y no quiero ser una Barbie. Prefiero modelos mas dinámicos y reales. Existen juguetes con los que sigues las instrucciones y construyes lo que te piden y listo, acabó el juego. Existen juguetes con los cuales puedes crear y estimular tu imaginación. Yo prefiero el segundo tipo de juguetes, y así es como quiero vivir mi vida: el reto lo pongo yo.

1 comentario:

  1. Observaba a todas mis compañeras del Colegio llevar sus "barbie's", sus grandes carros último modelo y hasta sus casa con todo el amueblado.

    Por mi parte era feliz con unas cuantas muñecas de mi madre, de esas que todavía eran de hule y no tenían tornillos en las piernas, así como los carritos de colección de mi hermano o los Caballeros del Zodiaco :) era más feliz con los sencillo y diferente, a lo típico de una "niña".

    Saludos, que estés bien :)

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