Tantas ganas de tenerte junto a mi.
Solías calentar mi espalda.
Cuidar por las madrugadas que no me destapara.
Observabas y me dejabas actuar.
Recordándome cuando era necesario, que era mejor portarme bien.
Dormir a tu lado me permitía alcanzar un sueño profundo y reparador.
Tenías todo bajo control y sin darme cuenta absorbías todas mis responsabilidades.
Cocinas lo necesario.
Sonríes como nadie mas.
Quien no envidia tu carcajada es porque no la ha escuchado.
Energía hasta yo no poderte seguir el ritmo.
Audacia como la de un político a punto de jubilarse.
En las épocas difíciles, demuestras la fortaleza que se necesita para actuar.
Cuanto quisiera ser un poco mas como tu.
Ahora tengo que valerme sin mayor apoyo tuyo.
Buscar un buen poncho y guardar mi propio calor en las noches frías.
Si que son noches verdaderamente frías.
Nadie sabrá lo que en realidad pasa, mas que yo.
El reto es igual no violar las tantas lecciones y valores que he aprendido de ti.
Duermo, no con tranquilidad, sino sueño con las cosas que todavía no he podido alcanzar.
Todo esta normal, pero no podría decir que esta precisamente bien.
Trato de no llamarte tanto.
"Aprieto", siguiendo tus consejos.
Si tan sólo pudieras hablar con todos los que me conocen.
No deberías estar sintiendo orgullo por mi.
No he logrado ni la mitad que tu.
Me siento hipócrita, doble cara tal vez.
De vez en cuando, dudo de mi capacidad.
Al mismo tiempo no dejo de pensar que todavía tengo mucho por dar.
No soy del tipo de personas que muestren su debilidad.
Cuando me quiebro no hay quien me arme con tu facilidad.
El escuchar tu voz deshace cualquier muro que por fortificado quiera crear.
Cuándo choqué por primera vez, derrame un lago en el carro.
Quería ahogarme en él, antes de confesar que era mi error.
Ahora en realidad me da gusto saber que estabas allí.
Al otro lado del teléfono, de la ciudad y ahora del otro lado del computador.
Qué mas da!
Me tocará esperar, me tienes que esperar.
Mas bien, te esperaré... con cierta ansia.
Eres la única persona en la que puedo confiar y ser.
La única forma de expresarlo es: un gran y profundo suspiro...
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Como niña que aprende a conducir bicicleta sin rueditas. Sabes que un momento te estarán acompañando en el camino, pero el resto lo recorremos solos, aun que nunca pierdan la vista de nosotros.... cuando caemos y miremos hacia arriba con los ojos vidriosos tendremos unas palabras magicas -No paso nada, vamos arriba- Un beso en la frente, una limpieza de rodias, un Sana Sana. Demuestra las enseñanzas que has visto con su ejemplo, Fortaleza y Trabajo.
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